Todo coleccionista pasa por diferentes fases en su afición. Exite una en la que sobre todo predomina la busqueda y la compra compulsiva de piezas. Cuando de trata de una colección tan extensa como la de Madelman, esta fase puede durar mucho. Aquí se disfruta menos de las piezas y lo que prima, es la busqueda. Una vez conseguido lo deseado, se guarda y a por otra.
Con el paso del tiempo, la colección va aumentando, cada vez quedan menos piezas a buscar y las conseguidas, las hay de todo tipo: completas, incompletas, con defectos, roturas, repetidas.....
Aquí comienza la parte más apasionante desde mi punto de vista, el completar y reparar todas aquellas que así lo requieran
En esta ocasión le ha tocado a la caja del submarinista de segunda edición madelman, una de mis preferidas. El inconveniente es que todos los trajes de hace 40 años están petrificados, dañados y son irreparables.
La primera fase ha consistido en desembarazarse de los trozos de goma negra, ya degradada, que ha manchado al muñeco e incluso a la caja. El muñeco se ha introducido en agua caliente ( no demasiado), que ha reblandecido esta goma y con mucho cuidado y paciencia se ha ido quitando.
Quitar las manchas negras de la caja, pegadas al cartón amarillo es casi imposible. Tocarlas significaría manchar aún más la caja, como además no se nota mucho, he decidido dejarlo como estaba. He comprado un traje repro en latex, de muy buena calidad por internet, me ha sorprendido el buen acabado que tiene. Al ponerselo al muñeco es practcamente identico al original.
Ya solo queda unir el muñeco a la caja con goma elastica identica a la original, utilizando los mismos agujeros ya practicados y ..........voala!!!! .... una maravillosa caja de madelman submarinista de segunda generación como las de antaño, una preciosidad para la vista.
Para acabar rodeamos a la caja con una capa de film transparente para aislarla y protegarla. Lista......a la vitrina!!!!
